La
campaña de declaración jurada que comenzó el pasado OCHO de enero y se
extenderá hasta el 30 de abril, lleva buen paso en Niquero, siendo fiscalizado
el ciento por ciento de las declaraciones presentadas y así será durante todo
el proceso, sin que se excluya ninguna de las actividades de los trabajadores
por cuenta propia.
La
fiscalización se hace en el instante en que las personas declaran, de forma tal
que si los ingresos no corresponden con los índices referenciales, se les hace
un requerimiento para que rectifiquen.
La fiscalización de las
declaraciones juradas tiene como fin exigir el pago exacto del impuesto
correspondiente a los ingresos personales, y es un proceso que se caracterizará
por su justeza, legalidad y transparencia.
En tal sentido, autoridades de esa institución
en este territorio, insisten en la necesidad de acudir a la oficina
de la ONAT,
en tiempo y forma, a sabiendas de que, por incumplir con esta responsabilidad
cívica, la persona o entidad son sancionadas.
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